La Tierra de Uno...





"Era casi de barro el pueblo. Polvo sobre polvo. La tierra pegajosa se alzaba de los callejones como un polen y se asentaba en los chañares y en los algarrobos. A veces se posaba en el alma; también, y en el tiempo. Y el tiempo estaba quieto allí hacía muchos años, cavado y carcomido. Una sola masa marrón era todo, manchada de islotes verdes alzados en apeñuscamiento de talas y yuyarales con flores doradas." M. Castilla





viernes, 9 de marzo de 2012

Y con hilos de sol de nuevo nos tejía...

























"¿Quién me arrima la paz de la tortuga?
¿Quién desempoza el tiempo de su cáscara?"



















































































































Ese Pequeño verde que brinca










"¿A dónde irán mis ojos llenos de hojas?
¿Por dónde en ellos vagará el cielo yéndose?"



























































Prendida al árbol















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